A diciembre del 2017, la deuda sumaba el 49,2% del Producto Interno Bruto (PIB) del país, un valor que algunos organismos internacionales califican como insostenible y que, para llegar a niveles normales no solo tendrán que pasar más de cuatro años; sino que son necesarios cambios en la composición de los gastos e ingresos del Gobierno, modificaciones legislativas, entre otras decisiones.