La presidenta del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), Eugenia Zamora, envió este jueves 30 de octubre una carta inédita al presidente de la República, Rodrigo Chaves, en la cual le reprochó que “está amenazando la paz y la estabilidad política del país”.
Por primera vez en la historia, la máxima autoridad del órgano electoral costarricense le llamó la atención al mandatario, por considerar que sus constantes críticas y señalamientos sobre supuestas animadversiones del TSE en su contra son un irrespeto a la institución que dirige.
Zamora dijo que se ha sentido irrespetada personalmente por Chaves; sin embargo, subrayó haber enviado la carta en defensa de la institución que resguarda al sistema democrático costarricense.
“No me mueven, consideraciones personales para dirigirme a usted. Merezco respeto como persona y usted me lo ha faltado, pero no es esa la razón que me obliga a pronunciarme”, redactó la funcionaria; quien luego calificó las manifestaciones en su contra por parte del presidente como “irrelevantes”.
“Pero no lo son en lo institucional y por la investidura que represento”, añadió. “Cuando usted, faltando a la verdad, acusa un sesgo partidario en mis actuaciones y en las de mis compañeras y compañeros del Tribunal como juezas y jueces electorales, está atacando la credibilidad de la institución que dirigimos, del proceso electoral que se avecina y del resultado de este que certificaremos".
La carta de Zamora llega después de meses de una campaña del presidente Rodrigo Chaves en contra del TSE, al cual acusa de querer “invisibilizarlo” y “amordazarlo”, como respuesta a la aplicación por parte del Tribunal de las normas que siempre han existido para evitar que los presidentes en funciones usen su influencia para fines político-electorales.
Al respecto, la presidenta del TSE le recordó al presidente que, “presentadas ya las candidaturas, el debate público nacional”, el foco de atención “no debe estar” en él como mandatario “sino en las personas que aspiran a ser electas y en sus propuestas”.
‘Cuidamos sus votos’
Chaves ha insinuado en múltiples ocasiones que el TSE tiene un sesgo en su contra, y que pretende beneficiar a viejas élites políticas.
Al respecto, Zamora le recordó a Chaves que él llegó al poder por medio elecciones dirigidas por el mismo Tribunal que ahora critica, y que ningún otro presidente en la historia reciente de Costa Rica llegó jamás a deslegitimar al Tribunal, tomando en cuenta que sería deslegitimar al mismo tiempo a su propio mandato presidencial.
“Es falso que el Tribunal Supremo de Elecciones esté sesgado en su contra”, le señaló; y luego también le recordó que la entidad “cuidó” los votos a favor en 2022, cuando el chavismo ni siquiera había podido inscribir a los miembros de mesa y fiscales suficientes para garantizar el resguardo de los comicios de aquel año en todo el territorio nacional.
“Declaramos la elección a su favor, porque fue la voluntad mayoritaria expresada en las urnas y eso para nosotros es sagrado. Desde entonces, hemos admitido y también rechazado denuncias en su contra, siempre conforme a lo que en Derecho corresponde a los jueces. Pero, por ese mismo respeto a nuestras responsabilidades constitucionales y legales, no podíamos incumplir nuestro deber de fiscalización del financiamiento de campaña, quedarnos de brazos cruzados cuando amenazó con un apagón de radio y televisión, o permitir que se trasgredan las normas que en Costa Rica exigen la imparcialidad política de las autoridades de gobierno”, apuntó.
Alusión a participación política
Zamora también criticó que el presidente quiera desprestigiarla, usando como argumento que participó en la primera administración del expresidente Óscar Arias. Al respecto, subrayó que esa información siempre ha sido pública en el sitio web del TSE y que no implica impedimento alguno para ejercer su cargo como ciudadana independiente.
Zamora fue viceministra de Justicia y Gracia, entre mayo de 1986 y septiembre de 1987, y directora del Despacho de la Presidencia, entre setiembre de 1987 y octubre de 1988; mucho antes de ingresar al TSE como magistrada en 2005.
Antes también había sido oficinista en el Banco de Costa Rica, asesora en el Ministerio de Hacienda, y había ejercido como abogada en bufetes privados y había ejercido como consultora de entidades internacionales.
“No sé si lo comprende, pero haber participado en algún partido político o servido un cargo durante un gobierno, no veta a nadie para la magistratura electoral en ninguna democracia del mundo, porque en democracia la participación político partidaria no es una vergüenza, sino un sagrado derecho ciudadano, y porque haber servido un cargo durante un gobierno, como usted mismo debe saber, no compromete a la persona con la agrupación política por la que se eligió ese gobierno“, afirmó.
Por último, la jerarca reiteró su compromiso de dirigir las próximas elecciones garantizando que “las y los costarricenses puedan votar en un proceso electoral libre, en el que las leyes electorales se cumplan y la voluntad popular se imponga”.
