El color de un automóvil, como en muchos aspectos, puede reflejar la personalidad, el estilo y, por supuesto, los gustos de su dueño.
Mientras que algunos se inclinan por tonalidades vibrantes como el rojo, el amarillo o el verde, otros prefieren la sobriedad y elegancia del negro, el gris o el azul. No obstante, existe un color que resalta por ser el favorito de la mayoría de los compradores de autos, tanto en América como a nivel global.
Durante décadas, el blanco ha sido el color dominante en las preferencias de quienes compran un automóvil en Norte, Centro y Suramérica (Costa Rica incluido, por supuesto); sin embargo, un cambio de gustos está en marcha, según el último informe global de color automotriz de la empresa alemana de químicos y pinturas BASF.
De acuerdo con el BASF Color Report 2024, una referencia clave en la industria, los consumidores se alejan de los favoritos tradicionales como el blanco, el negro y el plateado; una decisión que está allanando el camino para una mayor popularidad de los tonos vibrantes y los neutros cálidos.

Según el estudio, a nivel global, el blanco fue el color más elegido para los autos nuevos en el 2023, con un 36% de participación, y en el 2024, con un 34%. Y aunque sigue siendo la principal opción en las ventas de vehículos nuevos en América —con un 29% de la preferencia—, el amarillo, el beige y el verde son colores cada vez más atractivos.
El estudio revela que la cuota de mercado del color blanco en la región bajó en cinco puntos porcentuales (de 34% a 29%) con respecto al informe del 2023. El gris captura casi el 20% del mercado de las Américas y ahora comparte el segundo lugar con el negro, un color que también vio una ligera disminución en su popularidad (2% menos, en comparación con el 2023).
“El gris está redefiniendo el estilo automotriz, ganando popularidad por su versátil sofisticación a medida que las preferencias se alejan del blanco y el negro tradicionales”, dijo Victoria Fislage, gerente senior de Diseño de BASF Coatings, en un comunicado de la firma multinacional.
Además, los consumidores de las Américas demuestran una notable lealtad a los colores cromáticos clásicos. El azul sigue siendo el más popular, con un 9% de la cuota de mercado, seguido por el rojo, con un 7%.
El informe destaca que esta preferencia por el azul y el rojo diferencia a América de regiones como Asia-Pacífico, donde los tonos pastel y los colores como verde y amarillo están ganando terreno con el auge de los vehículos eléctricos.
Más allá del color
En el BASF Color Report 2023, América del Sur, región con la que Centroamérica comparte muchas tendencias, registró un impresionante 86% de vehículos nuevos de colores acromáticos (blanco, negro, gris y plata), la proporción más alta a nivel mundial. La cifra bajó al 80% para todas las Américas, en el 2024.
El estudio destaca que cada vez más fabricantes de automóviles optan por pigmentos de efectos para hacer que los colores acromáticos se destaquen. En comparación con el 2022, en el 2023 y el 2024 se entregaron más vehículos con pigmentos de efectos en todos los tamaños de carrocería.
“Los colores ya no son solo colores. Son experiencias. Tanto si se trata de perlas como de escamas metálicas u otros pigmentos, los efectos hacen que el color salte del vehículo a los ojos del espectador. Esto da un toque especial cada vez más popular”, afirmó en un comunicado Marcos Fernandes, director de Coatings de BASF para América del Sur.
Estas cifras se confirman en un reciente estudio de Nissan en América Latina. La marca analizó las ventas de su portafolio entre enero y junio del 2025, y encontró que el blanco, gris y plata fueron los colores más buscados por los compradores de la región.
Según el análisis, el blanco mantuvo su liderazgo en las ventas de la marca en la región (43% en el 2024 y 40,4% en los primeros meses del 2025), pero cedió espacio al gris, cuya preferencia creció del 18,4% al 20,3% en el 2025, y al plata, que subió del 11,9% al 13,1% en la región.
Tanto el estudio de BASF como el de Nissan, se observa un significativo resurgimiento de ciertos tonos cromáticos en la región. El verde y el amarillo, asociados con la naturaleza y la serenidad, está ganando terreno, particularmente para vehículos eléctricos (EVs) y modelos sostenibles.
El beige, que transmite tranquilidad y sofisticación, ha duplicado su participación en Europa, Oriente Medio y África, y está ganando atractivo en América.

Influencia cultural y funcional
La elección del color de un automóvil es mucho más que una simple preferencia estética; es un reflejo de diversas dinámicas de mercado, valores culturales y hasta consideraciones económicas.
El blanco mantiene su corona como el color más popular, una preferencia que trasciende la estética por su atractivo clásico, atemporal y por su alto valor de reventa. Esta inclinación hacia la practicidad y la protección de la inversión parece ser un pilar en la región.
El proyecto Cool Cars, patrocinado por la Comisión de Energía de California (CEC), investiga los beneficios de utilizar vehículos reflectantes solares y demostró que los carros pintados con colores claros reflejan hasta un 60% más la luz solar y reducen significativamente la temperatura interior del coche en comparación con los de colores oscuros.
El clima cálido predominante en Centroamérica y algunas zonas de Suramérica hace que los colores claros o más reflectantes, como el blanco, sean una elección funcional, ya que mantienen el interior del vehículo más fresco y reducen la carga sobre el sistema de climatización, lo que puede traducirse en ahorro de combustible y mayor vida útil de componentes.
El valor de reventa también es un criterio decisivo; el blanco, gris y plateado son consistentemente los más buscados en el mercado de autos usados. La facilidad de mantenimiento y durabilidad también favorecen al gris y plateado, que disimulan mejor la suciedad. Finalmente, la seguridad y visibilidad son consideraciones importantes, con colores como el rojo, amarillo y blanco asociados a un menor riesgo de accidentes.
Una de las razones culturales para elegir el color de un auto nuevo es no comprar un vehículo del mismo tono asignado a los taxis o vehículos de transporte público en cada país y evitar incómodas confusiones mientras circulan. Por ejemplo, es parte de los cuidados que toman quienes buscan un carro rojo en Costa Rica, blanco en Guatemala y Honduras, y amarillos en Panamá y El Salvador.
Aunque los acromáticos (blanco, negro y gris) dominan la región latinoamericana, cada nación de Centroamérica presenta particularidades.
No obstante, marcas como Kia, Lexus, Mazda, Suzuki y Changan destacan colores específicos y vibrantes (rojo, turquesa, naranja, azul) en sus ofertas de automóviles nuevos.
En cuanto a las preferencias al comprar autos usados, Javier Fernández, gerente general de la plataforma crautos.com, aseguró que es difícil brindar un dato confiable relacionado con la cantidad de carros de cada color que se venden en el país.
“Debido a que el color del vehículo es ingresado por el usuario y no es seleccionado de una lista, es un difícil dar número certeros. Por ejemplo, hay gente que al ingresar al sistema un carro gris le pone ‘gris’, ‘gris plata’, ‘gris ratón’ o ‘gris perlado’, etc. Igual sucede con otros colores más complicados”, explicó.
Tras esa observación, Fernández afirmó que, a grandes rasgos, desde el 2023 a la fecha, los colores más comunes que se venden en Crautos, en orden de prioridad, son gris, blanco, negro, azul, rojo, verde y café.