El mercado de dispositivos médicos de Costa Rica, un pilar de la economía que ya genera más de 55.000 empleos directos y representa cerca del 48% de las exportaciones de bienes del país, tenía una brecha en sus servicios especializados. Hasta ahora, las empresas requerían importar o gestionar en el extranjero los recubrimientos hidrofílicos, un proceso clave en la manufactura.
Esa brecha se achicó este 4 de noviembre. La compañía de capital estadounidense Harland Medical Systems anunció la apertura de su primera planta en Costa Rica, ubicada en Green Park, Alajuela. Esta sede se suma a sus operaciones existentes en Estados Unidos, Irlanda e Israel.
El movimiento estratégico busca mantener la cercanía con sus clientes, permitiendo “tiempos adecuados de respuesta brindando soporte regional y de entrega inmediata a los principales fabricantes de dispositivos médicos que ya operan en el país”, según la compañía.
“La llegada de Harland Medical tiene un significado muy especial y es que es la primera empresa en ofrecer en Costa Rica el servicio especializado en recubrimiento hidrofílico al ecosistema de la industria médica”, expresó la directora de Manufactura Avanzada de la Promotora de Comercio Exterior (Procomer), Lila Johnson, en un comunicado de prensa.

Un “avance silencioso” para la industria
La especialidad de Harland Medical es el recubrimiento de dispositivos médicos que, al ser water absorbing (absorbentes de agua), se vuelven resbaladizos. Esta tecnología es crucial para facilitar procedimientos mínimamente invasivos en sectores como neurología, cardiología, oftalmología y urología.
La viceministra de Comercio Exterior (Comex), Indiana Trejos, describió la apertura como “uno de esos avances silenciosos que marcan una diferencia real en la medicina moderna”.
“Al reducir la fricción entre los dispositivos y el cuerpo humano, estos recubrimientos permiten intervenciones más seguras, reduce los riesgos y brindan mayor comodidad a los pacientes”, aseguró.
La decisión de la empresa, que se había anunciado en enero de 2025, se basó en la potencia del clúster costarricense.
“A través de los años, Costa Rica se ha convertido en una potencia global de la innovación en la manufactura de dispositivos médicos”, destacó el vicepresidente global de ventas y marketing de Harland Medical Systems, Aaron Anderson.
Anderson citó la mano de obra calificada y la estabilidad local como factores decisivos.
Listos para operar de inmediato
La nueva planta, con un tamaño superior a los 1.200 metros cuadrados, iniciará con tres funciones principales:
- Servicios de recubrimiento: El recubrimiento hidrofílico de los componentes médicos que envían sus clientes.
- Distribución de materiales: Suministro local del químico de recubrimiento, lo que simplifica los procesos de importación y certificación para los fabricantes.
- Soporte técnico regional: Asistencia para las máquinas de recubrimiento y testeo que Harland fabrica.

El gerente país de Harland Medical Systems, Miguel Zaballa, confirmó el estado de la operación: “Nuestro mensaje principal es que estamos listos para la producción de inmediato”.
Zaballa también destacó la flexibilidad de la planta, señalando que, aunque comienzan con esos tres servicios, están “dispuestos a traer otros elementos de nuestra oferta global ‘Coatings 360’”, lo que incluiría servicios de laboratorio y testeo en el futuro.
