La Posada del Alivio abrió sus puertas en febrero de 1985 —hace 40 años— con el fin de apoyar a las familias de menores internados o atendidos en el Hospital Nacional de Niños.
Este es un albergue temporal que brinda hospedaje, alimentación y apoyo a quienes se encuentren en condición de vulnerabilidad o provengan de zonas alejadas del país, y es parte de los proyectos de la Asociación Pro-Hospital Nacional de Niños: la organización privada, sin fines de lucro y declarada de interés público desde 1979, que, mediante diferentes proyectos de recaudación, genera recursos con los que apoyar a ese centro médico.
La posada surgió de una alianza entre la asociación y la Fundación Santiago Crespo, con la cual se adquirió la primera casa que hospedaron familias de Guatuso, Los Chiles, La Cruz, Punta Zancudo, Bribri y Sixaola, entre otros.
Al inicio, el espacio se llamó Albergue Santiago Crespo pero luego cambió su nombre a La Posada del Alivio, en referencia directa a su propósito. Después las instalaciones pasaron a ser de la asociación, quienes lo administran y financian hasta la fecha.
“Yo tengo tres años administrando La Posada del Alivio”, dijo la coordinadora del albergue, Dixiana Camacho, en una entrevista con EF:
“Durante estos años he tenido bastantes papás por estancias muy largas. Recuerdo una mamá que duró un año completo aquí: ingresó un enero y salió un diciembre. Esa mamá era vecina de Guanacaste y estuvo, como dicen, al pie del cañón con su hija internada. Ese es un ejemplo del impacto que hemos generado en las familias beneficiadas”.

La ampliación
Este 2025, y en el marco del aniversario 40 de operaciones, la asociación planea ampliar el albergue y así duplicar su capacidad instalada.
Según dijo la presidenta de la organización Gabriela Llobet, “nos hemos dado cuenta de que realmente le damos un gran apoyo al hospital y a las familias de los niños, pero nos estamos quedando cortos”:
“La demanda es muy grande y en el propio hospital nos han hecho saber que sería muy bienvenido tener más espacio. Por eso, este año nos vamos a unir en una recaudación de fondos con el objetivo de reconstruir totalmente la posada”.
Esta reconstrucción planea aumentar la capacidad del espacio de los 22 cupos actuales, a 41. El nuevo edificio mantendrá el concepto de casa que tiene el actual, pero contará con un comedor y baños más grandes y con más áreas recreativas.
También tendrá un espacio dedicado a las pacientes de Neonatología, el cual estará ubicado en el primer piso para las madres que estén dando a luz y que necesiten mayor movilización, sin tener que bajar gradas.

El anteproyecto de construcción, que fue donado, ya está listo y en este momento están avanzando con los planos constructivos.
Por eso la asociación busca recaudar un millón y medio de dólares para, además de construir, equipar y amueblar la nueva posada.
El proyecto tardará nueve meses y, según Llobet, “en ellos nos comprometemos a tener un hogar satélite para continuar brindando los servicios al hospital y no parar. Ya estamos en esa búsqueda de opciones”.

La campaña de donaciones arrancó este agosto y los interesados pueden apoyar por las siguientes vías:
- Por SINPE Móvil al 7094-4274.
- A través de las cuentas bancarias de la Asociación Pro-Hospital Nacional de Niños, cédula jurídica 3-002-045192, cuenta IBAN CR23010200009447066885 de BAC.
Miles de beneficiarios
La Posada del Alivio está ubicada a 150 metros del hospital, “una ubicación estratégica para que las mamás —pues en su mayoría son mamás— puedan ir y venir, tener un descansito, bañarse si es necesario, y después volver con su hijo”, dijo Llobet.
Este espacio supera los 70 mil servicios brindados por año, entre los que se contabilizan más de cuatro mil hospedajes, descansos diurnos y espacios para citas médicas; más de 48 mil servicios de alimentación; 11.500 de higiene personal; 6.300 de lavandería; y unos 20 talleres psicoemocionales y recreativos.
De sus usuarios, más del 60% provienen de zonas alejadas de Alajuela, Limón y Puntarenas; el 90% son mujeres —en su mayoría de entre 18 y 49 años—; y son el único albergue autorizado para la atención de la población indígena, un grupo que, en 2024, significó el 17% de sus familias atendidas.
Para más información sobre la labor de la posada y sobre las formas de donar, los interesados pueden ingresar a sus redes sociales.