La fórmula presidencial del Partido Esperanza y Libertad (PEL) apenas logró sostenerse un mes desde su inscripción formal ante el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE). La tríada interna participará fracturada en la contienda electoral.
El 22 de noviembre, el Comité Ejecutivo del PEL decidió suspender toda participación partidaria de Fabiola Romero Cruz —candidata a la segunda vicepresidencia y exdirectora ejecutiva de la Dirección Nacional de Desarrollo de la Comunidad (Dinadeco)— tras confirmar, a partir de consultas realizadas por El Financiero (EF), que la Fiscalía Anticorrupción mantiene abierta una investigación en su contra.
Días antes, las diferencias entre la candidata y Carlos Palacios, presidente del PEL, desencadenaron la solicitud verbalmente de renuncia el jueves 19, según expresó Palacios a este medio. Esa petición fue el primer síntoma visible de una ruptura que el partido no logró contener.
De acuerdo con la agrupación, antes de aplicar la suspensión desconocían que la Fiscalía tramitaba una causa por presunto peculado contra Romero bajo el expediente 22-000244-1218-PE.
“Antes de su elección en dicho proceso, la señora Romero fue sometida a una prueba de polígrafo con preguntas específicas sobre vínculos con crimen organizado y narcotráfico, la cual no reflejó elementos que impidieran su participación”, justificó Palacios sobre el nombramiento inicial.
EF consultó a Romero — a través del número asociado a la candidata — sobre la relación que mantiene con el PEL y la suspensión que impuso la agrupación. Sin embargo, al cierre de edición no se recibió ningún tipo de respuesta de la candidata.

Presunto preculado
La causa por presunto peculado se relaciona con actuaciones de Romero durante su paso por Dinadeco. A EF llegó un mensaje de texto, desde el número oficial del partido, que explicaba el caso; sin embargo, Palacios y el partido se desligaron de ese contenido al afirmar que la línea de WhatsApp desde donde fue enviado habría sido hackeada.
“Es importante contextualizar que durante aproximadamente 50 años, en toda la existencia de la Dirección Nacional de Desarrollo de la Comunidad (Dinadeco), existió una práctica institucional en la que los directores nacionales eran trasladados desde su hogar por choferes de la institución. Esta práctica histórica se mantuvo con todas las direcciones anteriores. Una vez que la asesoría legal institucional advirtió que dicha práctica no se ajustaba completamente al marco de legalidad actual, la señora Romero detuvo de inmediato esa modalidad y comenzó a utilizar su vehículo personal para acudir a sus labores, sin volver a hacer uso del transporte institucional para esos efectos”, narra el texto que presuntamente no fue enviado por ningún representante del PEL.

Continuidad de la fórmula
A pesar del quiebre interno, la fórmula presidencial se mantendrá intacta, pues su inscripción ya fue oficializada ante el TSE. El PEL informó que en los próximos días notificará a las autoridades electorales sobre la renuncia solicitada a Romero y reiteró que ella no está autorizada a utilizar el nombre, logotipos, divisas, colores o medios de comunicación del partido.
Con ello, la agrupación asegura su continuidad en la contienda electoral, aunque lo hace enfrentando su segundo tropiezo importante: apenas un mes atrás se retiraron de la coalición chavista con la que inicialmente habían pactado avanzar.
El PEL argumentó meses atrás que la ruptura con la coalición se dio por la intención de limitar la libertad de expresión del partido.
