Adquirir un vehículo nuevo en Costa Rica es accesible para los asalariados que superan los ¢400.000 brutos de manera mensual. El mercado financiero ofrece para esos trabajadores créditos máximos que inician en $16.046.
Con esa cantidad es posible comprar algún modelo económico de las marcas Suzuki o BYD. Esas marcas, junto con Toyota, Nissan, Hyundai y Mitsubishi son las que registraron más facturaciones en Costa Rica el año anterior, según el sitio Car Industry Analysis.
La compra de distintos modelos de esos vehículos es posible para quienes devengan un rango salarial entre los ¢400.000 y no mayor a ¢1 millón. Ese grupo de trabajadores equivale al 42,2% de los asalariados, según datos proporcionados por el Sistema Centralizado de Recaudación (Sicere) de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) con corte a agosto del 2024.
EF capturó el valor de los modelos más económicos y más caros de las marcas de vehículos con la mayor cantidad de ventas en Costa Rica. Además, se le consultó a distintas entidades financieras el monto máximo de financiamiento que ofrecen a los salarios brutos que no cuenta con deducciones por deudas; Banco Nacional (BN), Davivienda, Cafsa y Promérica aportaron la información a este medio.
Carro y créditos
De acuerdo con datos de Sicere, un total de 696.154 personas perciben un salario entre los ¢400.000 y ¢1 millón.
Quienes reciben ¢400.000 pueden adquirir algún sedán, SUV o vehículo eléctrico que tienen el precio más económico en Toyota, Suzuki o BYD. El crédito máximo que otorgan Davivienda y Cafsa para este grupo de trabajadores es de hasta $23.500 y $16.046, respectivamente.
La opción más accesible con ese monto de financiamiento es el Suzuki Alto K10 $15.990, el cual tiene un motor de 1.100 centímetros cúbicos (cc), potencia de 66 Hp y capacidad para 27 litros de gasolina.
Si alguno de esos asalariados comienza a ganar ¢100.000 colones más, verá ampliado el abanico de opciones por medio del crédito al que tendrá acceso. El BN otorga un tope de $70.000 a quienes ganan dicho salario; con ese crédito es posible comprar distintos modelos de las seis marcas presentes en este artículo.
Manejar un pickup Hilux extra cabina, cuyo valor es de $45.600, o recorrer las calles en un X-Trail E-Power valorado en $48.900, es posible para quienes tienen un salario de ¢500.000 y reciben el préstamo del BN.
A través de esa misma entidad financiera se puede obtener un máximo de $80.000 para salarios entre los ¢600.000 y ¢1 millón, pero la aprobación final del monto dependerá del perfil del cliente y de estudios internos que realiza la entidad. Con ese préstamo es factible la compra del SUV eléctrico Tang de la marca china BYD a $79.690, o bien la Pathfinder de Suzuki a un costo de $79.900.
Davivienda también cuenta con créditos -con cifras menores- que pueden cubrir el costo de distintos modelos.
Los trabajadores que devengan entre ¢600.000 y ¢1 millón pueden acceder a financiamientos máximos entre los $34.500 y $56.000. Con esa cantidad de dólares se facilita la adquisición de un vehículo eléctrico Nissan Leaf o un Suzuki Jimny 5 puertas; no obstante, el monto se queda corto para ser propietario de una Pathfinder .
Condiciones del préstamo
Las cuatro entidades financieras mencionadas en este reportaje enfatizaron que el cálculo del préstamo aplica para salarios brutos sin deudas asociadas. Asimismo, es necesario que los futuros compradores presenten ante la sucursal bancaria la factura proforma emitida por la agencia que comercializa el vehículo.
Cristina Alarcón, gerente comercial de Davivienda Costa Rica, informó que los requisitos básicos para la gestión de un préstamo de vehículo son: cédula de identidad, firmar el formulario para autorización de Centro de Información Crediticia (CIC) de la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef) y completar formularios y solicitud de financiamiento.
Los entes analizan el nivel de endeudamiento del cliente a partir de la relación entre el ingreso y las deudas vigentes registradas en el CIC. También tiene relevancia el margen disponible para afrontar otras obligaciones de consumo.
Bernal Alfaro, director de Banca de Personas en Promérica, indicó que los interesados deben aportar la constancia salarial “no mayor a un mes de emitida o dos meses de colillas con ambas quincenas”.
La entidad que representa Alfaro es la que ofrece créditos más reducidos en comparación con las demás instituciones consultadas. A pesar de esto, con los montos que aprueban es posible financiar algún sedán, eléctrico o SUV; el camino de los pickup se torna complicado.
Algunos de los requisitos mínimos que solicitan los bancos y financieras son:
- Orden patronal no mayor a un mes.
- Continuidad laboral mínima de 6 meses.
- Firmar el formulario para autorización de Centro de Información Crediticia (CIC) de la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef).
- Completar formularios y solicitud de financiamiento.
Asimismo, los requisitos en caso de preferir la modalidad leasing son:
- Copia de identificación vigente.
- Certificación de ingresos brutos y netos.
- Autorización firmada del CIC.
- Declaración de renta.
“Algunos de los criterios para el otorgamiento del crédito incluyen contar con una calificación de 1 en el Centro de Información Crediticia y presentar información financiera. En el caso de asalariados, esto implica una orden patronal; mientras que, para profesionales independientes y empresas, se requiere un contador público autorizado (CPA) o estados financieros”, explicó José Paulo Martínez, gerente de Innovación y Desarrollo de Productos de CAFSA.
Las personas jubiladas tienen que presentar la constancia de pensión y estados de cuenta bancarios.
A tomar en cuenta
Al momento de asumir una deuda para la compra de vehículo es recomendable que el futuro deudor analice sus finanzas y la capacidad de pago a futuro. El primer factor a valorar es que la deuda no sobrepase el 30% de los ingresos.
Otro factor es el uso que se le dará al bien. Si es para uso dentro de la ciudad, el automotor no requiere gran capacidad contrario a un vehículo para la montaña o labores de trabajo pesado.
Asimismo, los gastos de traspaso son un componente importante. David Morales, especialista de la firma Grant Thornton, explicó a EF anteriormente que “solo el costo de un traspaso incluye, además de los timbres y honorarios regulares de inscripción, un gravamen del 2,5% del valor del vehículo”.
Además del cálculo de la inversión en la gasolina -para los vehículos de combustión-, hay aspectos relevantes que son periodicos. Estos son: marchamo, seguro, cambio de aceite, cambio de llantas, revisión reparaciones y lavado.