Si pagar sus deudas en las condiciones pactadas es cada vez más difícil o si ha tenido que empezar a costear gastos básicos mediante crédito, es necesario que empiece a tomar medidas pues usted podría haber caído en una situación de sobreendeudamiento.
Según Alonso Erak, director de fiscalidad internacional y precios de transferencia de la firma Grant Thornton, el sobreendeudamiento se da cuando el ingreso ordinario y recurrente de una persona ya no le es suficiente para pagar sus deudas en las condiciones en las que las pactó.
Esto genera que el deudor tenga que empezar a firmar créditos menos favorables para pagar lo que debe y aumenta el riesgo de enfrentar procesos de cobranza judicial o extrajudicial, de manchar el historial crediticio, de comprometer el presupuesto familiar y de afectar las relaciones con fiadores y hasta con la familia.
Por eso, en este artículo le enumeramos una serie de recomendaciones para que retome el control de sus deudas en esos casos donde el sobreendeudamiento ya es real.
LEA MÁS: ¿Cómo saber si estoy sobreendeudado? Conozca algunas opciones para enfrentarlo
Acéptelo y tome acción
Según la plataforma INA Virtual del Instituto Nacional de Aprendizaje (INA), el primer paso para salir de este círculo es aceptar que se está en él y, a partir de ahí, “modificar muchos de sus hábitos de consumo y, por ende, de su estilo de vida”.
Es básico que la persona entienda que “no todos los gastos que se hacen cubren una necesidad” y que separe aquello que desea de lo que en realidad necesita:
“Adquirir artículos como el último modelo de pantalla, celular o un carro del año puede resultar no esencial, sobre todo, si se está ante algún problema financiero”.
Por eso, el consejo es que se defina qué gastos realmente necesita y cuáles no y, a partir de ahí, tome acciones con “disciplina y constancia”:
“La disciplina y constancia son indispensables. Los cambios implican una variación en las rutinas diarias" pero estos "podrían ser temporales, siempre y cuando usted cumpla con los objetivos que se planteó. De lo contrario, caerá nuevamente en el círculo viciosos de trabajar para pagar deudas”.
A continuación le presentamos las recomendaciones:
- Monte un listado y prescinda de lo que no necesita:
Para definir de qué gastos puede prescindir, monte un listado durante un mes con todos los pagos que realizó diariamente. Esto le permitirá detectar los gastos hormiga que puede eliminar.
En este ejercicio incluya pagos fijos como vivienda, educación o alimentos; y variables de entrenamiento o vestuario.
- Prepare un plan para afrontar el pago de sus deudas:
Haga una lista de todas sus deudas a detalle: coloque los saldos, entidades, cuotas, tasas de interés y plazos, entre otros.
Una vez hecho eso, identifique la deuda con la tasa de interés más alta y priorice su pago por sobre las demás. Esto le permitirá ir saneando el problema por las ramas más gruesas.
- Unifique o renegocie deudas:
Usted tiene varias opciones para renegociar sus deudas: puede solicitar un cambio en los plazos, número y monto de las cuotas; y también puede agruparlas todas en una sola.
Estos procesos requieren del estudio del caso por parte del banco, pero si logra renegociar podría ayudarse bastante a reducir sus cuotas mensuales.
- No se endeude más:
A menos que se trate de una de las refundiciones de las que hablamos arriba, evite adquirir más deudas.
Eso es difícil en un contexto así pero la recomendación es que incluso destruya las tarjetas de crédito que cancele para que se vaya liberando de la tentación de gastar de más.
- Si una oferta parece demasiado buena para ser cierta, puede que lo sea:
Evite todas aquellas opciones que le ofrezcan tasas de interés extremadamente bajas, que le soliciten dineros por adelantado para obtener el crédito, que le ofrezcan montos demasiado elevados o donde le digan que le aprobaron el crédito sin ningún estudio previo.
Esas pueden ser trampas que le saldrán más caras a largo plazo.
- Entienda que no hay fórmulas mágicas:
No todos los casos son iguales porque no todas las personas y familias son iguales. Por eso mismo, cada una de las salidas al sobreendeudamiento debe estudiarse por separado y con calma, ajustándose a cada situación.
Sin embargo, lo que sí aplica para todos los casos es la regla de que mientras más pronto se empiece a tomar acción, más rápido se saldrá de esta situación.
Para más recomendaciones sobre este tema, ingrese a nuestra sección de Educación Financiera en Lab de Ideas.
