De acuerdo con un reciente reporte de las Naciones Unidas sobre cambio climático, si los líderes mundiales no toman acciones drásticas en poco tiempo, podría haber serias consecuencias para el planeta en los siguientes 25 años. Sin embargo, el presidente de los Estados Unidos ni siquiera comentó sobre el reporte cuando fue publicado, y un candidato puntero de la elección presidencial de Brasil ha prometido retirar a su país del acuerdo climático de París.
Si las personas están naturalmente motivadas a evitar amenazas a su existencia, ¿por qué es tan difícil para ellas responder al cambio climático?
Primero, actuar contra el cambio climático implica elegir beneficios de largo plazo sobre los de corto plazo, que es el intercambio más difícil para las personas. La investigación muestra que sobrevaluamos los beneficios a corto plazo en comparación con los de largo plazo. Por ejemplo, muchas personas no ahorran el suficiente dinero para el retiro, prefiriendo gastárselo en el presente en lugar de tenerlo en la vejez.
Ignorar el cambio climático en el corto plazo beneficia tanto a individuos como a organizaciones. Cuando ignoran los efectos que su huella de carbón tiene en el mundo, las personas no tienen que hacer cambios en los automóviles que manejan, los productos que compran o las casas en que viven. Las compañías pueden mantener bajos los costos de producción si no tienen que invertir en nuevos procesos para limitar las emisiones de carbón. Los gobiernos pueden ahorrar dinero al depender de combustibles fósiles para generar energía, en lugar de desarrollar fuentes de energía verde.
Segundo, el cambio climático es un problema no lineal. Las personas son particularmente buenas haciendo juicios en tendencias lineales. Si usted gasta $5 dólares diarios en café, entonces es fácil pensar acerca de la influencia que ello tiene en su presupuesto semanal.
Cuando una tendencia se incrementa lentamente durante un tiempo, antes de acelerar, las personas interpretan erróneamente el movimiento no lineal como si lo fuera. Unos cuantos cigarros probablemente no son mortales. En lugar de ello, es el daño acumulado de años de fumar el que lleva a significativos problemas de salud. En consecuencia, durante muchos años los fumadores podrían asumir el hábito sin consecuencias obvias, hasta que repentinamente hay un problema significativo. Como resultado, los problemas de salud parecen sorprender a las personas, cuando en realidad se han desarrollado todo ese tiempo. Del mismo modo, tomó mucho tiempo antes de que existiera cualquier señal de cambio climático que fuera obvia para las personas.
Tercero, muchos efectos del cambio climático son distantes para la mayoría de la gente. Algunos investigadores argumentan que las personas conceptualizan cosas que están psicológicamente distantes de ellas (en tiempo, espacio o distancia social) de forma más abstracta que aquellas psicológicamente cercanas. Los desastres climatológicos, como incendios forestales o tormentas extremas, muchas de las cuales pueden ser reflejo del cambio climático, tienden a suceder lejos de donde vive la mayoría de las personas. Como resultado, estas no necesitan lidiar con los efectos del cambio climático, y por ende pueden tratarlos como conceptos abstractos. Y los conceptos abstractos simplemente no motivan a actuar con tanta fuerza como los específicos.
Cuarto, el futuro siempre es más incierto que el presente. Por ello las personas valoran más al presente. Después de todo, si ahorra mucho dinero para el retiro, no hay garantía de que viva lo suficiente como para disfrutarlo. En el caso del cambio climático, algunos escépticos argumentan que no hay certeza de que la actividad humana provoque las graves consecuencias climáticas que algunos expertos han proyectado.
Aunque todos estos factores trabajan en nuestra contra, sigue habiendo esperanza. He aquí un par de cosas que puede hacer para atender el cambio climático.
Trate de reducir la distancia psicológica entre el presente y el futuro, de forma que pueda imaginar al cambio climático afectando su vida cotidiana. Sólo cuando experimente en el presente esta amenaza futura tendrá la suficiente fuerza motivacional para involucrarse en acciones que requieren esforzarse más hoy, como usar el transporte público o apagar el aire acondicionado en un caluroso día de verano. Familiarícese con reportes y predicciones climáticas, y considere cómo su vida cotidiana se verá afectada por el cambio climático.
También puede iniciar una discusión seria acerca de valores con sus colegas. La idea de que las opciones en el presente son más importantes que las opciones en el futuro representan una elección entre diferentes tipos de valores. Finalmente, tenemos que estar dispuestos a entender los valores a partir de los cuales actuamos.
Art Markman ocupa la cátedra Annabel Irion Worsham de psicología y marketing en la University of Texas, Austin. Es autor de “Smart Thinking,” “Smart Change” y “Habits of Leadership.”