A abril del 2019 los ingresos del Gobierno Central crecen al ritmo del 9,2%, más del doble del dinamismo que mostraban hace un año.
Aunque positivo, ese ánimo es insuficiente para contrarrestar el crecimiento de los gastos.
Los egresos repuntaron 11,3%, en gran parte impulsados por el imparable crecimiento del pago de los intereses de la deuda.
LEA MÁS: Hacienda canjeó más de ¢194.000 millones por instrumentos que vencen a más de cinco años
Al término del cuarto mes del 2019, el déficit fiscal fue de 2,08%, y mantiene su tendencia al alza.
Estos últimos crecieron menos que al mismo corte del 2018, pero su peso como porción del PIB lleva cinco años de alzas consecutivas. Pasaron de acaparar 0,73% del PIB en abril del 2014, a 1,31% al mismo mes del 2019.
También, el gasto de capital presentó un mayor dinamismo y así logró representar el monto más alto a abril de los últimos cuatro años.
Las remuneraciones bajaron su dinamismo y esto permitió reducir el gasto corriente sin intereses.